Lammens y Ginés González García acordaron la creación de un comité para habilitar protocolos y comenzar a abrir las actividades deportivas.

Al igual que en la mayor parte del planeta, la pandemia de coronavirus le puso un freno total a Argentina. Y el fútbol no fue la excepción: el martes 17 de marzo, apenas 72 horas antes de que el Presidente, Alberto Fernández, declarara la cuarentena obligatoria en todo el país para evitar la propagación del virus, la AFA suspendió la totalidad de sus actividades a partir de un pedido del ministro de Turismo y Deportes, Matías Lammens, y poco más de un mes después, anunció la terminación de la temporada 2019/20 de todas las categorías.

"Cuando tengamos los tests rápidos, los clubes podrían testear la salud de sus equipos y garantizarnos que ninguno de los que juegan está enfermo. Son tests que en 40 minutos te van a decir si tenés coronavirus o no. Entonces, podríamos dar ciertas reglas para que el fútbol vuelva", fue el último guiño de Fernández. Y ras una reunión entre Lammens y Ginés González García, se acordó la creación de un comité que habilitará protocolos para que los deportistas -no solo los futbolistas- puedan regresar a los entrenamientos, bajo una modalidad similar a la que se está usando en Europa. La fecha tentativa sería el 25 de mayo, aunque ello dependerá de las instituciones.

Sin embargo, lo que prima es la cautela a la hora de pensar en posibles partidos. "No estamos cerca de que vuelva el fútbol. Es cierto que para un jugador profesional es difícil estar parado tanto tiempo, pero debo decir que no es una prioridad", avisó el ministro de salud en su momento. "Yo amo el fútbol y desde que me enteré que Argentinos va a jugar la Copa Libertadores me muero de ganas de que vuelva. Por ahí podemos empezar a disfrutar el fútbol por televisión, pero también hay que tener cuidado con el contacto entre jugadores", acotó el Presidente. En ese sentido, dejó en claro una vez más que cuando la actividad regrese, será sin público en los estadios: "No podemos volver a la aglomeración de gente, eso es muy riesgoso. Vamos a tener que evitar el contacto en espectáculos públicos por mucho tiempo. No lo veo en lo inmediato".

Por su parte, Claudio Tapia, remarcó el riesgo que igual implicaría jugar sin público. "Terminado el invierno, cuando cambie la temperatura, quizás podamos volver a entrenar, si no hay riesgos. También jugar a puertas cerradas es un riesgo", señaló, en declaraciones a Club 947 FM. Y agregó: "Tenemos que ser responsables y tomar las decisiones cuando las autoridades nos den las garantías. No es simpático decir que volvemos por necesidad económica".

Uno de los que dio el visto bueno para volver a las prácticas fue Victor Blanco, quien advirtió este martes que en Racing "hay acuerdo para volver a entrenar a fines de mayo o principios de junio", aunque también hay voces que se oponen como José Sand, quien admitió que "tengo miedo de volver a entrenar y contagiarme". En el medio de las posturas por ahora se mantiene Boca, ya que Jorge Amor Ameal se limitó a contar que traducirán y analizarán el protocolo utilizado en Alemania para que la Bundesliga vuelva este fin de semana.

Más allá de que en el anuncio original se había establecido el 31 de marzo como fecha de regreso de la actividad, tanto Lammens como Marcelo Tinelli (presidente de la Superliga) dejaron rápidamente en claro que la elección de la fecha fue una mera formalidad y que el destino de la pelota estaba atado a las medidas generales dispuestas por el Gobierno nacional. De hecho, el domingo 22 de marzo, el propio Alberto Fernández dejó en claro que la vuelta de la actividad estaba muy lejos de ser una prioridad: "El fútbol puede esperar. Primero tenemos que atender a los enfermos y que no se enfermen más. Esto nos complica a todos, pero hay que tener paciencia".

Dos semanas después, con la extensión de la cuarentena general ya decretada hasta el 12 de abril inclusive, el Presidente argentino volvió a ser consultado por la vuelta del fútbol y su respuesta no fue muy diferente a la anterior. "Mayo sería el peor mes porque se espera el pico", señaló el máximo mandatario, en declaraciones a Radio Mitre, y agregó: "El fútbol es una de las actividades, como el cine y el teatro, que más van a sufrir la salida de la cuarentena. Por ahí, sin espectadores se puede flexibilizar de a poco, pero con gente es imposible".

Por su parte, ya con la segunda extensión de la cuarentena hasta el 26 de abril, el presidente de Lanús, Nicolás Russo, sostuvo que la vuelta del fútbol puede demorarse más de lo que muchos imaginan. "No descarto que el fútbol vuelva a fines de agosto o principios de septiembre", dijo, en declaraciones a Radio Continental, y agregó: "Si se espera el pico de contagio para la segunda quincena de mayo, las prácticas no arrancarían antes de fines de junio o principios de julio. Los planteles van a necesitar como mínimo 45 días de trabajo. No están acostumbrados a estar parados tres meses".