Adelardo es una leyenda del Atlético: el que más partidos ha jugado con la camiseta rojiblanca y ganó diez títulos. El 1 de mayo de 1976 disputó su último encuentro oficial. Lo hizo en Sarriá.

El 1 de mayo de 1976 fue un día importante para Adelardo Rodríguez, leyenda del Atlético de Madrid. Ese día el centrocampista del equipo rojiblanco jugó su último partido oficial con la camiseta rojiblanca. Posiblemente entonces no lo sabía, pero el estadio de Sarriá vio vestirse por última vez a Adelardo de rojiblanco en choque oficial. El partido, corresopondiente a la jornada 32, acabó con 1-0 para el conjunto catalán, gol obra de Cuesta. Luis Aragonés formó ese día con Reina; Marcelino, Panadero, Heredia, Capón; Eusebio (Bermejo, 67'), Adelardo, Leal; Leivinha, Gárate y Ayala (Alberto, 79'). Ese día Adelardo ponía punto y final a su carrera en el Atlético. Es el jugador que más veces ha vestido la camiseta del equipo madrileño, en 553 ocasiones.

El Atlético jugó posteriormente ante el Valencia y Real Madrid, para cerrar el campeonato, y tras ello jugó la Copa. Eliminó en cuartos al Barcelona y en semifinal a la Real Sociedad. La final, jugada el 26 de junio de 1976, supuso un nuevo título para el Atlético, ya que el equipo madrileño derrotó al Zaragoza. En el Bernabéu Gárate marcó el 1-0 y José Eulogio recogió el título copero, aunque Adelardo era el capitán. Pero el centrocampista no volvió a jugar más tras el partido liguero en Sarriá. Ese título copero sí forma parte del historial de Adelardo, pues había jugado en la anterior eliminatoria copera de ese año, ante el Sporting. El palmarés de Adelardo con el Atlético es de ensueño.

Después de jugar 17 temporadas en el Atlético, Adelardo se retiró habiendo jugado 553 partidos y marcado 113 goles. Ganó tres Ligas, cinco Copas, una Recopa de Europa y una Copa Intercontinental. Nadie jugó más que él y encabeza el ránking de partidos disputados con el equipo madrileño. Segundo es Tomás Reñones y tercero Collar, compañero de Adelardo durante algunos años de la carrera del extremeño. Koke, con 446 partidos, está llamado a dar alcance a Adelardo, algo que nunca ha importado al exjugador rojiblanco. Es más, siempre se ha mostrado orgulloso de que pueda ser Koke quien le pueda alcanzar algún día.

Adelardo, natural de Badajoz, hizo prácticamente toda su carrera profesional en el club madrileño. Jugó en Segunda División en el Badajoz hasta que en el verano de 1959 jugó un amistoso ante el Atlético, lo que provocó que terminara recalando en la entidad madrileña. Al principio lo pasa mal, pero pronto se asienta en el equipo rojiblanco. Jugó las finales coperas ante el Real Madrid en el Bernabéu, la final de Recopa, empezó a ganar títulos ligueros... Y se hizo imprescindible en el Atlético. Así, un año tras otro. Centrocampista con mucha llegada y gol, de un gran trabajo, Adelardo vivió los momentos más importantes del Atlético en la década de los años 60 y 70 hasta su retirada. Jugó la final de Copa de Europa que el conjunto madrileño perdió ante el Bayern, tras el empate alemán en el último segundo de encuentro y el posterior partido de desempate. Siempre admitió que le quedó el haber ganado ese título europeo.

Adelardo lo ha sido todo en el Atlético. Figura indiscutible allí donde va, ha representado al Atlético siempre de la mejor manera posible. Bien como director de la Ciudad Deportiva de Majadahonda o como director de la Fundación. Su vida ha sido siempre en rojo y blanco. Su partido de despedida fue el 1 de septiembre de ese 1976. Villalonga, Tinte, Barinaga, Otto Bumbel, Balmanya, Otto Gloria, Marcel Domingo, Merkel, Lorenzo y Luis fueron los técnicos de Adelardo. En esa última temporada hizo una labor un tanto oscura, pues además de jugar desempeñó funciones técnicas. Ayudó a Luis en la labor de hacer informes de los siguientes rivales del Atlético.

En su partido de homenaje el Atlético jugó ante la selección de México. La afición que se dio cita en el Vicente Calderón le ovacionó como pocas veces se ha ovacionado a un jugador del Atlético. Su equipo perdió y él admitió posteriormente que no pudo evitar llorar en el vestuario rojiblanco: "Lo pasé muy mal", admitió Adelardo. El Vicente Calderón vio sus últimos momentos como jugador en un amistoso. Pero el estadio de Sarriá, en Barcelona, le vio disputar el último partido oficial. Tal día como hoy hace 34 años una leyenda del Atlético jugó su último encuentro.