La temporada 2020/21 también permitirá hacer cinco cambios por partido a los equipos que lo estimen oportuno. La decisión adoptada por la IFAB alarga una posibilidad que tras la vuelta del parón ha sido bien recibida -al menos en la parte práctica- por la gran mayoría de los entrenadores de las grandes ligas. Eso sí, no ha estado exenta de polémica. ¿Es una medida que favorece a los mejores equipos con plantillas largas? O al contrario: ¿permite a los más pequeños meter todavía más piernas frescas que les permitan aguantar el resultado? En LaLiga, estos son los datos tras diez jornadas.

Mismo uso entre las plantillas más caras y más humildes

A favor o no de la medida, lo cierto es que todos los entrenadores de la competición nacional han echado mano de más de tres futbolistas suplentes en varias ocasiones, beneficiándose así de la decisión de la IFAB. ¿Los que más? El Sevilla de Lopetegui y el Levante de Paco López: ambos han hecho absolutamente todos los cambios posibles menos uno, lo que suma un total de 49 sustituciones realizadas de 50 posibles en diez encuentros. El lado contrario lo ocupa el Real Madrid (4 cambios por partido), el FC Barcelona (4,2) y la Real Sociedad (4,2).

Una vez conocida la intención de aumentar el número de cambios para este final de temporada, la polémica comenzó a girar entorno a quién beneficiaba esta modificación de las reglas: a los más grandes o los pequeños. Pues bien: ambos la han utilizado por igual. Los diez equipos con más valor de plantilla según Transfermarkt promedian 4,55 cambios por encuentro, mientras que los diez conjuntos con el valor más bajo mantienen una media de 4,54. Todos los equipos de LaLiga se han beneficiado de la decisión, aunque en términos de resultados algunos más que otros.

Simeone es el rey del cambio y Zidane apenas lo ha necesitado para ganar el título

Las diez jornadas que van de Liga post-confinamiento nos han dejado 68 goles o asistencias de futbolistas que entraron al césped de suplentes. Una cifra que se reparte entre 19 equipos: ningún jugador del RCD Espanyol ha marcado o asistido tras el confinamiento saliendo desde el banquillo.

En las antípodas de los pericos está el Atlético de Simeone. El 'Cholo' ha dominado como nadie el manejo de sus suplentes y nadie se le acerca en la capacidad que ha demostrado para influir en el transcurso del partido. En total, siete dianas y cinco asistencias repartidas en los diez encuentros. El Real Madrid, por ejemplo, tan sólo ha logrado un gol y una asistencia, ambas de Marco Asensio en el partido frente al Valencia (3-0). El Barcelona de Quique Setién, dos tantos y un pase de gol.

El cambio 4 y 5 ha sido poco decisivo en los resultados

De estos 68 goles o asistencias, cabe destacar que el protagonismo lo siguen teniendo los cambios que se realizan primero. Las tres primeras sustituciones han marcado el 86,37% de los tantos y repartido el 92% de últimos pases. Por tanto, la importancia del cuarto y quinto cambio, en términos de resultado, ha influido más bien poco, aunque sí ha ayudado a los técnicos a cambiar dinámicas y oxigenar al equipo.

Una ayuda que se ha notado, sobretodo, en el principio de la competición y en este final. En la primera jornada tras el confinamiento se realizaron 94 cambios de 100 posibles, una cifra que se redujo a 89 en la siguiente pero que volvió a aumentar a 94 en la tercera, cuando los futbolistas empezaban a acusar los efectos de jugar tres encuentros en diez días. Una cantidad, 94 (4,7 cambios por equipo), que no hemos vuelto a ver hasta la pasada jornada, la 37 del campeonato, cuando se produjeron hasta 95 sustituciones, récord de la temporada (4,75). Y es que 16 de los 20 equipos de La Liga agotaron los cinco cambios mientras que los otros cinco se quedaron en cuatro sustituciones. Un número que se puede explicar de la misma manera que las nueve rojas en diez encuentros: la tensión de lograr los objetivos está llevando a los futbolistas al límite. Y ante eso, un cuarto y quinto cambio puede ser oro para el entrenador que los sepa utilizar.